Se define al Spam como el uso inapropiado del e-mail y los mensajes, que consiste en enviar información y publicidad a personas que no lo solicitaron. Tenemos que aclarar que no existe normativa internacional que establezca qué es un Spam y cuándo no lo es. Este tipo de publicidad origina altos costos para las empresas.
En Chile, la Ley del Consumidor (19.496) sanciona esta práctica comercial pues considera que vulnera el derecho a la libre elección del consumidor, en especial, su derecho a la privacidad. Por lo tanto, los usuarios tienen derecho a exigir que se les remueva de las listas de destinatarios. La ley obliga a quien envíe una comunicación promocional o publicitaria por correo electrónico, a indicar:
(1) la materia de que se trata en el encabezado (asunto o subject).
(2) identificar quién envía el correo (remitente)
(3) indicar una dirección válida a la que se pueda solicitar la suspensión de los envíos.
La individualización de quién envía el correo debe permitir saber qué proveedor está detrás, su nombre, domicilio, actividad, representantes, teléfonos y todo otro dato relevante. Los correos anónimos o con información incompleta infringen la Ley.
Si una vez solicitada la suspensión de los mensajes, el envío persiste, el remitente podrá ser castigado con una multa de hasta 50 UTM.
Otro fenómeno que está afectando a la industria del Internet marketing a nivel internacional, nos encontramos que las autoridades Europeas de Protección de Datos han acordado reforzar los derechos de los internautas ante la recepción de publicidad 'online', de forma que será obligatorio el consentimiento previo del navegante para recibir cualquier tipo de 'cookie'.
Se ha creado un comité de trabajo de la Administración comunitaria para reformar la directiva sobre Privacidad y Comunicaciones Electrónicas y ha aprobado un dictamen que señala que el actual sistema de 'opt-out' (el usuario recibe estos archivos no ejecutables a menos que los deshabilite) es insuficiente para garantizar la privacidad del consumidor. Para algunos esta medida es demasiado restrictiva y consideran que es una acción que se refleja en la navegación de las máquinas y no de las personas que intervienen en ella para otra postura existe información que se remite desde el terminal a terceros y eso puede ser considerado un riesgo para la privacidad de las personas.
El abuso del marketing relacional cada vez está generando una presión de las personas para poner límite a la intromisión en el espacio de privacidad, la autorregulación juega un rol relevante al momento de generar campañas de ésta materia, conceptos de “permission marketing”, concepto utilizado principalmente por vendedores en línea, comerciantes en particular, correo electrónico y marketing de búsqueda, así como algunos vendedores directos que envían un catálogo en respuesta a una solicitud.
Hoy varias son las herramientas con que cuentas las empresas para realizar publicidad y promociones, pero se debe ser cauto en utilizar estas tecnologías, porque también pueden afectar la intimidad de los consumidores.
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